miércoles, agosto 19, 2009

Terror en el Océano.-


El viento sopla de estribor a babor. Todo marcha bien, puedo llegar tranquilo a la costa, ver a mi familia, salir a trabajar el lunes, depués podré cortar el pasto de mi jardín, hacer el amor con mi mujer, con mi amante, y con la empleada, asistir a mis a el domingo, llamar a un amigo que no veo hace tiempo, jugar con él unas mesas de pool, cenar en la noche con mi esposa, hacer el amor de nuevo.

Para de solpar el viento. miro a mi alrrededor y el mundo es tan tranquilo como una vaso con agua, no hay ruido aparte del que hacen las gaviotas al alejarse, noa hay nadie más que yo en este mundo, la tensión aumenta. No se que hacer, muevo las velas, pero no asa nada, de nada sirve sacar un remo, no puedo mover el velero yo solo. respiro profundo, reviso las posibilidades, y nada. salto, grito, flasfemo, miro desesperado hacia la costa, que no está tan lejos, solo un esfuerzo más, solo un soplo más, y nada. espero a que puedan cambiar las cosas. Como algo, ha pasado tanto tiempo que no reuerdo nada aparte de estar detenido en el mar. es de noche, es de día de nuevo, se acaba la comida, es de noche. nadie me busca, ni mi mujer, ni mi amante ni me empleada, ni mi amigo que no veo hace tiempo, ni el cura de la iglesia, ni mis compañeros de trabajo, nadie ha notado que no estoy, nadie ha notado que el viento ya no sopla.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario