Máscaras

Nunca podemos saber quien realmente somos en la soledad. Sino que solo vemos espejismos de lo que queremos ser. Sin reflejo, sin competencia, sin juicios, sin retos. Sin espejos, ni rostros que nos muestren el resultado de nuestras acciones, palabras o pensamientos. Sin miedo a ser juzgados y rechazados. Por eso usamos mascaras, para ocultar la verdad de los demás. Pero hay veces en que esas mascaras no sirven, se caen, se gastan, o pasan a ser tu verdadero rostro. El siceo de la verdad siempre está en nuestros oídos, dicíendonos que nos quitemos la mascara, pero ¿Qué sacamos con dejarnos vulnerables? ¿dolor? ¿más dolor? ¿traición? ¿honestidad? Podemos ser quienes queramos con las máscaras, pero hay que ser un muy buen actor, ya que si en cualquier momento se nos cae, o la perdemos, nuestra real cara sale a la luz, y hay veces en que, lo que ven los demás es odioso.